Ya que en varias ocasiones os he hablado de algunos de los tratamientos que realizamos en el spa, ahora trataré de describiros con detalles uno de ellos, de los más demandados tras los masajes tradicionales. Se trata del Aromaplastie Facial, que es un tratamiento facial, de 85´ de duración, diseñado por la firma Decleor. No lo explicaré al dedillo, pues esta firma, al igual que Ytsara, ha creado unos protocolos que debemos seguir, y seguimos al pie de la letra, siendo muchos pasos que haría interminable esta entrada.
El/la cliente, una vez que lo recibimos y acompañamos a la cabina, se pondrá la braguita de celulosa que le damos y se tumba boca abajo (algo de lo que se sorprenden al principio) para realizarle un pequeño masaje de espalda, de unos 10-12´ de duración. Comenzamos con una toma de contacto en el pie y talón para ir subiendo por la pierna con presiones de la palma de las manos, glúteos y espalda. A continuación hacemos el masaje de espalda, que alterna presiones con lisajes y amasamientos. Mientras hacemos este masaje, tendremos colocada una bolsa de agua caliente sobre la región del sacro. Al acabar, subimos por la espalda presionando con la bolsa de agua y se retira. El cliente se da la vuelta, le colocamos la bolsa sobre el abdomen y lo cubrimos.
Comenzamos con la cara. Demaquillamos ojos y cuello y rostro. Tonificamos. Limpiamos la cara y aplicamos un producto exfoliante. Limpiamos realizando la técnica del oshibori, que consiste en aplicar unas toallas con agua caliente de una forma preestablecida. A continuación, volvemos a tonificar cuello y cara. A continuación, comienza el masaje facial. Se realiza con un aceite esencial (en este caso demoninado Neroli) basado en esencias de Nerolí (extraído del naranjo amargo), Petit Grain (también procedente del naranjo amargo), sándalo, salvia, perejil y ballas de enebro. Se realizan con presiones suaves, desde el 3º ojo, frente, bajo las cejas, bajos los ojos, junto a la nariz, sobre el labio superior, bajo el labio inferior, mentón. Después, con un bálsamo con parecidos ingredientes, realizamos una especie de drenaje en los mismos puntos que en el paso anterior. Para acabar el masaje facial, con ese mismo bálsamo hacemos un masaje que va desde el esternón hasta la frente, pasando por el cuello y la cara. En estos dos pasos se da la curiosa circunstancia de que debemos colocar las manos en el esternón y en el escote antes de seguir subiendo. La clienta que viene por primera vez, al principio, se nota que se pone algo nerviosa, pues puedes percibir cómo se le sube el pulso. Siempre me hace gracia cuando lo noto.

Ahora toca poner la mascarilla facial, por lo que aplicamos una crema protectora en cuello y cara y otra en los ojos. Aplicamos una gasa en la mitad superior de la cara y otra en la mitad inferior y el cuello. La mascarilla la preparamos con una mezcla de cereales en polvo y agua caliente, que aplicamos sobre toda la cara y el cuello con una espátula. Se deja que actúe durante unos 15 minutos, mientras tanto hacemos un masaje de brazos y manos.
Una vez pasado ese tiempo, se retira la mascarilla y aplicamos los oshiboris nuevamente para retirar el resto de producto. Tonificamos. Para finalizar, se aplica una crema hidratante para la zona de los ojos y otra para la cara y el cuello.
Hacemos unas suaves presiones desde los hombros a los pies y acabamos con una ligera presión en los pies.
¿Qué tal? ... eso es lo que preguntamos al acabar ...
Hay que decir que durante todo ese rato tenemos música ambiente relajante, luz ténue y unas velitas encendidas.
A mi me encanta hacer este tratamiento, pues me relaja mucho.
El/la cliente, una vez que lo recibimos y acompañamos a la cabina, se pondrá la braguita de celulosa que le damos y se tumba boca abajo (algo de lo que se sorprenden al principio) para realizarle un pequeño masaje de espalda, de unos 10-12´ de duración. Comenzamos con una toma de contacto en el pie y talón para ir subiendo por la pierna con presiones de la palma de las manos, glúteos y espalda. A continuación hacemos el masaje de espalda, que alterna presiones con lisajes y amasamientos. Mientras hacemos este masaje, tendremos colocada una bolsa de agua caliente sobre la región del sacro. Al acabar, subimos por la espalda presionando con la bolsa de agua y se retira. El cliente se da la vuelta, le colocamos la bolsa sobre el abdomen y lo cubrimos.
Ahora toca poner la mascarilla facial, por lo que aplicamos una crema protectora en cuello y cara y otra en los ojos. Aplicamos una gasa en la mitad superior de la cara y otra en la mitad inferior y el cuello. La mascarilla la preparamos con una mezcla de cereales en polvo y agua caliente, que aplicamos sobre toda la cara y el cuello con una espátula. Se deja que actúe durante unos 15 minutos, mientras tanto hacemos un masaje de brazos y manos.
Una vez pasado ese tiempo, se retira la mascarilla y aplicamos los oshiboris nuevamente para retirar el resto de producto. Tonificamos. Para finalizar, se aplica una crema hidratante para la zona de los ojos y otra para la cara y el cuello.
Hacemos unas suaves presiones desde los hombros a los pies y acabamos con una ligera presión en los pies.
¿Qué tal? ... eso es lo que preguntamos al acabar ...
Hay que decir que durante todo ese rato tenemos música ambiente relajante, luz ténue y unas velitas encendidas.
A mi me encanta hacer este tratamiento, pues me relaja mucho.